Forzar cerraduras pertenece al pasado
Tal y como recopila Securitas Direct, estas son los nuevos sistemas para robar en las viviendas más vulnerables sin ser detectados:
Bumping
Es una de las técnicas más utilizadas en robos hoy en día, debido a que se emplea un sistema bastante sencillo, pues únicamente se necesita una llave debidamente manipulada y cualquier objeto con el que golpear, por ejemplo, un martillo o un destornillador, para hacer saltar de forma automática los cilindros del bombín. Se calcula que más del 90% de las cerraduras existentes en el mercado pueden ser abiertas gracias al método bumping.
Impresioning
Se trata de una técnica algo más sofisticada, ya que aparentemente no deja rastro de forzamiento de cerraduras en puertas o ventanas. Este método basada colocar varillas de aluminio deformable dentro de la cerradura para que queden impresas las marcas de la llave del propietario y posteriormente, con una llave maestra, poder abrir la puerta sin oposición alguna y sin dejar rastros.
Ganzúa
Es algo menos común, ya que la abrir cerraduras con esta herramienta requiere mucho tacto, una buena visión espacial y mucho entrenamiento.
Imán
Con este sistema se reducen mucho las posibilidades para los ladrones, ya que solo funciona cuando la llave está puesta por dentro. Con un potente imán, los delincuentes son capaces desde el exterior de hacer girar la llave puesta, logrando así su objetivo.
Taladro
Gracias al uso del taladro, los malhechores hacen un pequeño agujero en el marco de las ventanas para introducir por él un pequeño alambre y lograr así abrirlas.
Marcador
Este método es utilizado por delincuentes itinerantes que colocan una pequeña tira de plástico transparente, doblada en forma de pinza, en la parte baja entre el marco y la puerta de entrada. El objetivo es evitar que cualquier residente en el edificio los detecte y tengan así vía libre para actuar.
Escalo
Podríamos decir que el sistema menos sofisticado de todos, pero aún así, uno de los que siguen y seguirán en auge. Escalar por las azoteas y fachadas de los edificios es una de las técnicas que más utilizan a día de hoy los ladrones.